Marcha fúnebre
Expresión empleada en el ámbito de la gestión de proyectos para identificar un proyecto destinado al fracaso por carecer de expectativas realistas en su programación o alcance.
La expresión tiene su origen en el título del libro "Death March" en el que su autor, Edward Yourdon, expone las circunstancias y características de este tipo de proyectos.
Las "marchas fúnebres" minan la moral de las personas implicadas, que se ven impotentes para corregir el curso del proyecto y presionados con jornadas extenuantes.
Las razones de las "marchas fúnebres", según Edward Yourdon son:
- Política, política, política.
- Promesas ingenuas y/o tortuosas hechas por el departamento de marketing, los altos ejecutivos, los gestores de proyectos sin experiencia, etc.
- El optimismo ingenuo de la juventud: "Podemos hacerlo en el fin de semana".
- La mentalidad "startup" de las empresas novatas".
- La mentalidad del "Cuerpo de Marines": "Los verdaderos programadores no necesitan dormir".
- La intensa competencia provocada por la globalización de los mercados.
- La intensa competencia provocada por la aparición de nuevas tecnologías.
- La presión provocada por una normativa gubernamental imprevista.
- Crisis inesperadas y/o no planificadas. Ej: un proveedor clave acaba de quebrar, o las tres personas clave del equipo acaban de morir de peste bubónica.